Una célula de carga sirve para medir fuerzas de tracción estáticas y dinámicas. Además de medir la fuerza también se puede utilizar para determinar el momento par o de torsión. La célula de carga está disponible en diferentes versiones y se puede usar en diferentes áreas. Un medidor de fuerza o célula de carga puede ser muy útil en las técnicas de ensayo para determinar la calidad de los materiales y las técnicas de automatización. Existen diferentes tipos de célula de carga o medidores de fuerza. En un medidor de fuerza de resorte el cuerpo del resorte se deforma cuando se aplica la fuerza. En el caso de una célula de carga piezoeléctrica, la aplicación de la fuerza produce una distribución de la carga que es proporcional a la fuerza. También existe la célula de carga con elementos vibratorios, que sólo se utilizan en casos especiales.
La célula de carga con compensación electromagnética sirve para medir fuerzas especialmente muy pequeñas. Se suele integrar en balanzas de precisión, balanzas analíticas y microbalanzas. La determinación de las diferentes fuerzas, como las fuerzas transversales, las fuerzas de compresión, las fuerzas de torsión o las fuerzas de tracción, puede hacerse con bloques de fuerza y pernos de carga. La célula de carga hidráulica se está reemplazando cada vez más por medidores de fuerza digitales, ya que casi todos los procesos de trabajo están ahora digitalizados. Por otro lado, la célula de carga hidráulica puede ser usada en análisis de temperatura y datos climatológicos. Además, son más robustos y raramente requieren que se realiza un mantenimiento. Un medidor de fuerza de bloque es, como la palabra implica, una célula de carga en forma de bloque, que es muy robusta y que se utilizan en muchas balanzas. También existe el medidor de fuerza con una célula de carga con forma de perno, que se utiliza para medir fuerzas de tracción y compresión. Toda célula de carga requiere un indicador separado para mostrar en pantalla la fuerza medida.