El conductímetro para medir la conductividad eléctrica de metales no férricos, como el aluminio o el cobre, forma parte del grupo de equipos NDT. Hablamos de un conductimetro para realizar ensayos no destructivos. El principio de medición que usa el conductímetro es la corriente de Foucault, lo que permite determinar de forma rápida y precisa la conductividad eléctrica.
La frecuencia de trabajo del conductímetro es de 60 kHz, por lo que el rango de medición es muy amplio. Abarca desde 0,51 hasta el 112 % IACS, y alcanza una resolución de hasta 0,01 % IACS y una precisión de ±0,5 % a 20º C. Gracias a su compensación de temperatura y compensación Lift-Off hasta 500 µm, el conductímetro mide con precisión en piezas revestidas o corroídas, o expuestas a cambios en las condiciones ambientales.
La medición de la conductividad eléctrica de metales no férricos, como el aluminio, cobre, titanio, magnesio o bronce, es apta para diferentes aplicaciones donde se necesita determinar los metales o las características de aleaciones. Los campos de aplicación típicos son la evaluación de diferencias en la resistencia de materiales tratados térmicamente o endurecidos, la autentificación de aleaciones en monedas, la comprobación de aleaciones no homogéneas en componentes críticos, o la ordenación de materiales.
El conductimetro se alimenta a través del acumulador interno. Se carga a través de la clavija situada en la parte inferior. Integra también una interfaz USB que permite leer los datos del equipo. Así podrá realizar un análisis posterior de los valores individuales o grupos de medición. En esta imagen se aprecia también el panel de control del conductímetro. Las teclas son grandes y el manejo sencillo.